Gravity Falls: Un Verano de Misterios
Hace unos años, allá por las oscuras épocas de 2008, existió una animación en Cartoon Network llamada The Marvelous Misadventures of Flapjack, fue una propuesta innovadora, torcida y sumamente oscura. Tal vez un intento por recaptar la audiencia que la salida del aire de Las Sombrías Aventuras de Billy & Mandy dejó a la deriva o tal vez un respiro de aire fresco para una cadena en evidente agonía, sea cual sea el caso, esa animación sirvió como escuela para tres animadores sumamente prometedores: Pendleton Ward (creador de Adventure Time), J. G. Quintel (creador de Regular Show) y Alex Hirsch (creador de Gravity Falls). Mucho se ha hablado ya de la obra de los primeros dos animadores, ¿pero qué hay del tercero?
Inspirado por sus nostálgicos veranos en compañía de su hermana gemela, Alex Hirsch trajo a la vida esta singular animación. El lugar es Gravity Falls, un pueblo pequeño olvidado por la mano de Dios en el estado de Oregon. Los personajes principales son Dipper Pines, un chico de 12 años sumamente suspicaz, aparentemente maduro y serio cuyo carácter hace que discuta frecuentemente con su hermana gemela Mabel, que a pesar de ser la mayor por 5 minutos es todo lo contrario a él, es una ingenua, fantasiosa e increiblemente fastidios; ambos son enviados por sus padres a pasar el verano con su tío abuelo Stan, un conocido estafador y viejo gruñón que atiende una tienda llamada La Cabaña del Misterio, conocida por ser una trampa para turistas ingenuos. Emulando las clásicas tiendas engañabobos que presentan criaturas extrañas como un mono-sirena o un jackalope (mitad conejo, mitad venado).
Pareciera que estoy describiendo una clásica caricatura de sábado de los 90’s, ¡Pero no! Sino qué caso tendría escribir sobre otra animación genérica. Desde el primer día en Gravity Falls, Dipper se topa con un misterioso diario, el cual contiene información sobre todos los misterios del pueblo como zombies, gnomos, fantasmas, vampiros gigantes, entre otros. Dipper decide que dedicará su verano a investigar todos los misterios descritos en el diario, y las incógnitas que rodean al autor de éste.
Pero bueno, después de todo esto se preguntarán ¿vale la pena verla? Cuando realmente deberían preguntarse ¿Por qué no la he visto?
Sin duda agradará a más de uno, ya que mezcla el encanto retro de las animaciones con las que muchos crecimos, chistes aleatorios, bromas internas con poco o ningún sentido y lo mejor, su propia mitología y dejo de misterio sobrenatural que ha hecho que los fans creen sus propias teorías para explicar todos los acertijos que se han presentado; digo, no por nada se le refiera como “El Lost de las caricaturas”.
Para cerrar con broche de oro, les presento el pegajoso intro.
