Music Monday: Malina
¿Qué rock, banda? Hoy traemos un álbum para los frikispaneros más exigentes. Sin duda uno de los mejores discos del año pasado y uno de los mejores del género progresivo en la década. Este #MusicMonday: Malina de Leprous.
A pesar de ser una de las bandas más intrigantes de los últimos tiempos, una buena forma de comprender a Leprous es imaginar sus álbumes como el soundtrack de una película de acción. Con matices alegres, tensos, explosivos y hasta románticos, la banda noruega nos lleva de la mano por una aventura sonora en cada una de sus producciones, y cada una se torna más interesante.
Malina se presenta con Bonneville, un intrigante preludio que nos dirigirá suavemente hacia el corazón del disco. De inmediato, un cambio emocionante. Aparece Stuck abruptamente con un ritmo y una letra conflictiva digna de un opening y sin cometer errores, nos entregan a From the flame, una pista clave en la que declaran que la voz es la guía y el centro de atención del álbum. Pero no debemos apresurarnos, ya que las cosas agarrarán un ritmo más serio en Captive, la cuarta pieza donde la instrumentación resalta emparejando a la potente voz de Einar Solberg, para volver a dejarnos suavemente en sus manos para illuminate.
Llegamos finalmente a lo emocionante, el corazón de Malina: Mirage. La séptima pista del álbum llegará por sorpresa con mucho del Leprous de siempre, y con todo lo que esperábamos de las pistas anteriores a ésta: un clímax total. Durante sus 6:48 minutos de duración quedaremos encantados pues, es el punto en que la potente voz de Solberg se une a unos dominantes riffs y rítmos acelerados donde el bajo y la batería destacan de una manera impecable. Por si ésto no fuese suficiente para el escucha exigente, una pista más adelante se encuentran Coma y The Weight of Disaster otras grandes obras, donde los instrumentos y la voz tienen una batalla épica por el control del disco que concluye con The Last Milestone, pero donde afortunadamente los ganadores siempre seremos nosotros.
Malina podrá parecer inconsistente a ratos, pero como les había dicho, hay que verlo como el soundtrack de una historia, la historia de Leprous. Gran parte de las piezas son dominadas por la voz y melodías un tanto suaves para el género. Pistas como Malina, Leashes, y la impresionante The Last Milestone donde Soldberg entrega todo su talento, nos muestran los últimos pasos en los que ha experimentado la banda, mientras que con los últimos segundos de Bonneville, Mirage, nos remontaremos al estilo usual que la banda ha tenido desde su origen 2001, obviamente también dándonos maravillas como The Weight of Disaster que es producto de los 16 años de carrera que la banda tenía a su lanzamiento.